Presentamos este primer número del año en víspera de un importante acontecimiento: la celebración del bicentenario de la Declaración de la Independencia en nuestro país.
En el plano coyuntural, estamos transitando un momento histórico complejo, en todas las latitudes del planeta, incluida Latinoamérica y el Caribe, y Argentina como parte de ella.
Esta efeméride, si la proponemos en clave de su significado y enseñanza histórica, nos provee de profundos interrogantes sobre cómo interpretar aquellos desafíos emancipatorios y cuál es hoy el correlato en materia de obtener la verdadera y definitiva independencia.
Nuestro Movimiento siempre ha reivindicado aquella gesta liberadora, y lo hizo en el marco de su compromiso e identidad solidaria, signados por su participación y pertenencia a las causas populares y por su convicción cooperativista y transformadora.
Las complejidades de la actual sociedad contemporánea nos inducen a estimular la percepción de las múltiples realidades y diversas dimensiones desde diferentes ópticas epistemológicas, pero con un diapasón común de valores y principios, siempre anclado en que la producción de conocimiento de lo social, cultural, económico, ecológico, etc. estén al servicio de las dinámicas de la praxis.
Las miradas que enfatizan, de modo unilateral, los aspectos de la vida social que nos alarman, nos ocupan y nos convocan a cambiar el mundo, nos llevan a correr el riesgo de perspectivas reduccionistas y, peor aún, paralizantes.
Aquellas que, por el contrario, focalizan parcialmente elementos positivos del escenario, omitiendo las amenazas que acechan a la Humanidad en su largo caminar histórico, incurren en una ingenuidad que tendrá, en espejo, consecuencias negativas, al no dar cuenta de aquellos obstáculos para el avance de procesos sociales de mayor justicia.
Nuestra Revista asume y se propone reflejar que la realidad que nos rodea, condiciona y desafía, es una totalidad compleja, contradictoria y en desarrollo que nos llama, como colectivo cooperativista, a intervenir, tanto denunciando injusticias, como anunciando realizaciones y sueños que nos proyecten a una sociedad mejor.
Los viejos sueños y las actuales condiciones que son la plataforma real del cooperativismo transformador exigen dar cuenta tanto de las circunstancias externas, como de las construcciones que, paso a paso, nuestro movimiento va plasmando en palabras y en actos.
Se retoman en esta edición, muy interesantes trabajos sobre la situación del cooperativismo en países de nuestra región, poco conocida para el público argentino. Nos referimos a los casos de Puerto Rico, Cuba y al Chile posdictatorial entre 1990 y 2015.
Otro grupo de artículos refiere a las novedades que trae el siglo XXI en el movimiento cooperativo, si bien expresan procesos de maduración que comienzan bastante antes. El primero de ellos reflexiona sobre los procesos de autorregulación colectiva de trabajadores de empresas autogestionadas, aportando muy interesantes elementos para pensar modelos democráticos de gobierno en empresas no lucrativas. Otro refiere a novedosas articulaciones entre sindicalismo y cooperativismo desplegadas a partir de la creación de cooperativas de trabajo en situaciones críticas de las empresas en situación de inviabilidad económica.
El despliegue de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) en la vida social resulta un punto de indudable relevancia que incide también en el despliegue de los proyectos cooperativos.
Se incluye un trabajo sobre la historia de la Banca Pública y su aporte en la región, y otro sobre normativa, que estudia el lugar del cooperativismo en el nuevo Código Civil y Comercial de la Nación.
Otro de los artículos describe la experiencia de un espacio transversal de fortalecimiento y formación de doce entidades nucleadas en el IMFC que retoma la tradición formativa de nuestro movimiento pero le imprime la novedad de un trabajo compartido, enriqueciendo a la totalidad de las entidades involucradas.
En otro orden, se destacan las experiencias de dos mujeres cooperativistas, que hacen énfasis en los debates en torno a la igualdad de género en el movimiento cooperativo. Sobre esto también se suma una charla debate organizada en noviembre de 2015 por el Centro Cultural de la Cooperación “Floreal Gorini” y Economía Femini(s)ta titulada “El rol de la mujer en la economía: desigualdad, trabajo, participación política y desafíos de la economía con perspectiva de género”.
Finalmente, hay dos trabajos sobre la Alianza Cooperativa Internacional. Uno de ellos refiere a las posiciones en debate en la institución planetaria que nos alberga y, especialmente, las propuestas llevadas adelante por la región latinoamericana, del candidato a la presidencia de la Alianza, Ariel Guarco.
Un segundo texto es un documento promovido por la ACI Américas titulado “Documento de Estrategia. Incidencia en Políticas Públicas sobre América Latina”. Esta propuesta consiste en invitar a las organizaciones cooperativas de cada país de la región a relevar problemas y elevar propuestas a los Estados nacionales. Entendemos que, independientemente de la orientación política de cada gobierno de turno, la política pública orientada a la economía social y al movimiento cooperativo debe ser construida, diseñada, implementada y evaluada con la activa participación de las organizaciones solidarias.
En las nuevas circunstancias que se despliegan en nuestro planeta, nuestra región y nuestro país, es tarea de nuestro Movimiento aportar a la comprensión de la coyuntura, y contribuir a elucidar desafíos y caminos para avanzar en respuestas y construcciones superadoras. Aspiramos a que este número de la Revista Idelcoop, construido con rigor epistemológico y con compromiso solidario, aporte en esta dirección.
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