Revista Idelcoop nº 244 - Noviembre 2024 - ISSN Electrónico 2451-5418 / Sección Reseñas
Idelcoop Fundación de Educación Cooperativa
Economía Social y Solidaria y Género. Una mirada desde Iberoamérica. (Coords.) Marie J. Bouchard (Canadá), Carmen Marcuello Servós (España) y Juan Fernando Álvarez Rodríguez (Colombia). Editorial CIRIEC, España, 2024.
María Florencia Rodríguez[1]
El libro Economía Social y Solidaria y Género. Una mirada desde Iberoamérica reúne el interés colectivo por abordar y reflexionar acerca de las experiencias de la Economía Social y Solidaria y la relevancia que asume la perspectiva de género en el sector. Desde sus principios, la Economía Social Solidaria e incluso el cooperativismo, han surgido con la necesidad de generar cambios en el orden establecido, de buscar otras vías posibles de superación de la tensa relación entre capital/trabajo; otros modos de ejercer la vinculación entre los y las seres humanos y los recursos materiales necesarios para la reproducción ampliada de la vida, sostenida en la idea de la solidaridad, la participación democrática, la toma de decisiones colectivas y autogestionarias que superen las dinámicas patrón/explotación/alienación. Las perspectivas de géneros nucleadas en el movimiento de mujeres también comparten la idea de promover acciones conjuntas que hagan posible el salto cualitativo a una vida sin alienación, sin violencia, y el reconocimiento social de una distribución equilibrada de las tareas que desarticulen las relaciones de poder entre hombres y mujeres. En ambas perspectivas aparece un mismo componente a enfrentar: la desigualdad en clave histórica y estructural, que atraviesa nociones de clase en el ámbito productivo laboral, y nociones culturales de género entre el mundo público y privado, la división sexual del trabajo y las tareas de cuidado.
Esta publicación abona a pensar en estas sinergias sin desconocer las dificultades y los obstáculos que las mujeres enfrentan en cuanto a sus participaciones y roles en la toma de decisiones en los ámbitos de conducción dentro de las propias organizaciones cooperativas, de la economía social y solidaria. Esto supone un gran reto, no solo para las mujeres cooperativistas sino para todo el colectivo organizacional que constituye el sector. Como expresa Mutuberría Lazarini “un primer paso es desmitificar que las organizaciones de la economía social no reproducen desigualdades de géneros y plantear los desafíos que tenemos en torno a ello” (2022, p.32). Siguiendo con la autora, las organizaciones cooperativas no pueden estar ajenas a las situaciones de desigualdad de las mujeres en la sociedad como tampoco en cuanto a la subordinación de la población feminizada en los ámbitos de dirección de la organización, a la vez que es necesario revalidar los principios y herramientas del cooperativismo con perspectiva de géneros para revertir la desigualdad patriarcal e incluir sus alcances en la vida organizativa de la Economía Social (Mutuberría Lazarini, 2022).
Las cuestiones mencionadas acompañan las 266 páginas del libro con foco en un abordaje territorial amplio que incluye las producciones, reflexiones y escritos de mujeres profesionales, académicas, activistas, militantes y cooperativistas de Iberoamérica. El propósito que guía el texto es recuperar los aportes y las experiencias de mujeres que cotidianamente abordan, estudian y vivencian otras formas de afrontar las realidades cotidianas sobre la base de los principios del cooperativismo y la asociatividad en clave comunitaria, productiva, laboral, y social, orientadas a la gesta de estrategias concretas de integración que trascienda los límites impuestos por las dinámicas capitalistas, patriarcales y mercantilizadas de producción social. Los capítulos incluyen experiencias de la economía social y solidaria y el rol activo de las mujeres y colectivos de la diversidad en estas organizaciones, tanto de entornos rurales como urbanos, para los casos de Argentina, Brasil, Chile, Costa Rica, Perú, Ecuador, España, México, Paraguay y Uruguay.
La presente publicación tuvo lugar en el marco del Observatorio Iberoamericano de Empleo y Economía Social (OIBESCOOP) y el Centro Internacional de Investigación, Documentación e Información de la Economía Social, Pública y Cooperativa (CIRIEC Internacional) de España junto con la Coordinación de Marie J. Bouchard (Canadá), Carmen Marcuello Servós (España) y Juan Fernando Álvarez Rodríguez (Colombia), con el objetivo expreso de poner de manifiesto el potencial de la Economía Social y Solidaria así como los retos vigentes para cada una de las organizaciones, presentadas a modo de caso, en la búsqueda por construir cambios sociales con perspectiva de géneros, lo que implica la articulación de varios enfoques como la economía de cuidado, las políticas de inclusión, la autonomía organizacional y la autogestión.
Los 12 capítulos que estructuran el libro pueden ser recorridos para su lectura de manera independiente, pues cada uno cuenta con su propia argumentación y desarrollo sostenido sobre su eje de problematización, aunque también pueden leerse de manera agrupada ya sea por países, ámbitos (rural y urbano), tipo de organización, o ejes temáticos.
Dentro de las líneas temáticas pueden identificarse cuatro grandes dimensiones que acompañan el desarrollo del escrito; 1) el rol institucional que incluye el papel de las instituciones académicas y estatales en la promoción e impulso de actividades vinculadas al desarrollo de proyectos de la Economía Social; 2) las experiencias de las mujeres en la ESyS vinculadas a actividades productivas rurales y agrarias; 3) la cuestión del empleo urbano, el trabajo feminizado y el rol de las cooperativas de mujeres y colectivos de la diversidad; 4) por último, un tema relevante, el empoderamiento, la participación y el liderazgo de las mujeres en sus propias organizaciones cooperativas de la Economía Social y Solidaria. A su vez, estas dimensiones se articulan unas con otras pudiendo ver el entramado de una extensa red de temas que guían el abordaje.
Como parte de la dimensión institucional, los Capítulos 1 y 8 invitan a reflexionar sobre esta cuestión. El Capítulo 1 “Puentes entre economía social y economía feminista. Una mirada desde la Red Universitaria de economía social y solidaria de Argentina” reúne el interés de las autoras Violeta Boronat Pont, Alberta Bottini, María Florencia Cascardo, Marisa Fournier, Valeria Mutuberría Lazarini y Vanessa Sciaretta, por abordar la vinculación entre las acciones de docencia, investigación y extensión universitaria del campo de la Economía Social y Solidaria con la temática de géneros, en el marco del Espacio de Géneros de la Red Universitaria en Economía Social y Solidaria (RUESS) de la Red de Extensión Universitaria de Argentina. A los fines de conocer estas articulaciones no solo en clave de producción y reproducción de conocimiento sino en torno a las prácticas de extensión en relación con la comunidad, se procedió metodológicamente a la realización de un relevamiento cuantitativo y cualitativo, mediante un cuestionario auto-administrado suministrado por los canales institucionales de la RUESS. De la labor de campo realizada en 2023, las autoras identifican una presencia activa de actividades universitarias en las que se articula la Economía Social y Solidaria con los temas de género. Este enfoque es tomado en consideración por varias universidades en las áreas de docencia e investigación, aunque también se detecta un crecimiento notorio en las actividades de extensión. Asimismo, también se evidencia como desafío la importancia de establecer ámbitos de encuentro entre las universidades y otros actores no académicos en pos de fortalecer las redes y abonar a la construcción de una agenda conjunta para el desarrollo de la economía social, solidaria y de género. Con aterrizaje en Costa Rica, el Capítulo 8 “Emprendimiento social/rural, instituciones y resiliencia. Evidencia para una economía emergente con rostro de mujer: caso Costa Rica”, analiza las experiencias de emprendimientos llevados adelante por mujeres frente a las dificultades contextuales de inserción de la población feminizada al mercado laboral formal. Bajo la autoría de Monserrat Espinach Rueda, Federico Li Bonilla, Fabián Enrique Salazar-Villano, se procedió a un relevamiento de encuesta en una feria de emprendedores y emprendedoras a los fines de identificar la participación del sector femenino y los desafíos por revertir la desigualdad de género en el ámbito del trabajo. El artículo deja en evidencia la importancia de las políticas públicas estatales y el rol de la universidad en la promoción y acompañamiento de estas iniciativas sostenidas por mujeres. A través de programas de capacitación, asesoramiento y asistencia técnica, el gobierno central y la Universidad Estatal a Distancia (UNED/Costa Rica) -en colaboración con el Sistema de Banca para el Desarrollo y del Fondo de crédito al servicio de la micro, pequeña y mediana empresa (FODEMIPYME)- contribuyen a guiar e incentivar la formalidad de las actividades productivas y/o de servicios de las pequeñas emprendedoras mujeres en el marco de la Economía Social y Solidaria. Entre los desafíos, en el capítulo se resalta la importancia de las políticas públicas a los fines de acompañar activamente la reducción de las brechas de género, sobre la base de un profundo cambio cultural a nivel país, dispuesto a sensibilizar a los hombres en las tareas de cuidado, de modo que las mujeres dispongan de tiempo, así como de financiamiento de microcréditos para formarse y abocarse a sus proyectos productivos y laborales.
En torno a las experiencias de las mujeres en las actividades productivas agrarias y rurales de la Economía Social y Solidaria, el Capítulo 2 “Nuevos roles de la mujer en las asambleas ejidales en México” realizado por Cristina Girardo Pierdominici, Tatiana Vanessa González Rivera, Imke Hindrichs y Prudenzio Mochi Alemán, invitan a reflexionar acerca del papel de la población femenina en la estructura orgánica ejidal y en las actividades productivas. Con un recorrido conceptual e histórico, los y las autoras y autores hacen un repaso por las características de la propiedad ejidal, entendida como un conjunto de parcelas de tierras de propiedad social, de tenencia comunitaria atribuida al pueblo o núcleo de población campesina que se asume como ejido. Esta dinámica organizacional de la tierra y de la comunidad plantea además su funcionamiento a través de órganos centrados en la autogestión y democracia. El texto señala con claridad las desigualdades presentes en clave de géneros, pues, aunque la ley reconoce a las mujeres como titulares de derechos agrarios y ejidales, sus participaciones han sido limitadas. Como trabajadoras productivas rurales han tendido a recibir microcréditos menores y con pocos beneficios con respecto a los hombres, sumado a la poca participación que se les ha otorgado en los órganos de decisión de los ejidos certificados. Los niveles de integración a espacios de poder y gobierno constituyen un tema a seguir enfatizando y un desafío presente desde las voces y relatos de las mujeres ejidatarias.
El Capítulo 4 "Contribución de la economía solidaria para la autonomía financiera de las mujeres brasileñas en el contexto de la agricultura familiar” es desarrollado por Leomara Battisti Telles y Candida Joelma Leopoldino quienes se proponen abordar el papel relevante de las mujeres en las actividades de producción, sin perder de vista la invisibilidad que aún se mantiene en las zonas rurales en torno a sus labores en los asuntos del trabajo y la gestión. En similitud con la situación ejidal de México, estas autoras sostienen que las normativas y legislaciones de Brasil buscan ser progresivas en cuestión de género, sin embargo, se presentan grandes limitaciones fácticas como sucede con la propiedad de la tierra hacia la población feminizada. La falta de acceso y control de la tierra impacta desigualmente sobre la autonomía financiera y los derechos económicos y sociales de las mujeres rurales. Telles y Leopoldino recuperan los valores de la solidaridad, la diversidad e igualdad presentes en la Economía Social y Solidaria proponiendo como objetivo investigar la contribución de la ESS a la autonomía financiera, y a la emancipación política y social de las agricultoras familiares en Brasil. En sus reflexiones las autoras señalan que la economía solidaria puede ser protagonista de las transformaciones en las relaciones de género aún tan desiguales, para lo cual es necesario el desarrollo de políticas públicas que fortalezcan a la ESyS y a la agricultura familiar a nivel federal, estatal y municipal.
“¿Quién negocia la igualdad?” es el comienzo a modo de pregunta del título del Capítulo 10 “La perspectiva de género en la negociación colectiva del cooperativismo agrario en Uruguay”, cuyas autoras, Silvana Maubrigades y Mayra Fernández Ripa, analizan la negociación colectiva de las cooperativas agrarias y las sociedades de fomento rural en Uruguay con perspectiva de género. Esta investigación enfatiza los modos de negociación por los actores involucrados de los grupos 22 y 23 de los Consejos de Salarios (delegación empresarial, trabajadora y el Estado). Desde los años ’90 hasta el presente, el incremento de la mano de obra femenina en la producción familiar rural continúa, sin embargo, las brechas salariales se mantienen entre hombres y mujeres. La distancia entre lo establecido en la norma y su efectividad práctica aparece nuevamente en este trabajo, pues, si bien en el año 2005 se reestableció la negociación colectiva de trabajo con inclusión del sector rural, las mujeres constituyen la minoría en el mercado asalariado formal del mismo modo en el ámbito de la representación sindical. El presente trabajo busca problematizar la incorporación de las desigualdades de género a estos espacios de negociación colectiva y cómo es percibida por los actores vinculados al sector. A lo largo del capítulo, las autoras señalan que, en tales negociaciones, las mujeres comenzaron a tener más participación y visibilidad de su situación debido a la intervención concreta y directa del rol integrador del Estado. El desafío de hacer frente a las asimetrías del mundo laboral sigue sin duda presente, así como pensar en la implementación de políticas de cuidado en un ámbito rural con condiciones de trabajo, horarios, distancias geográficas y ausencia de servicios públicos diferentes al medio urbano.
Las tareas de cuidado son recuperadas en la dimensión del empleo urbano feminizado y las cooperativas de trabajo. Precisamente en este eje, las chilenas Paula Miranda Sánchez y María Alejandra Inostroza Correa, titulan el Capítulo 3 “Cooperativas de cuidados: una deuda pendiente en la informalidad laboral femenina”. Aquí, a través de un estudio cualitativo, abordan las experiencias de personas asociadas al mundo de las cooperativas de cuidado, describiendo las principales barreras y facilitadores que influyen en el establecimiento de este tipo de cooperativas en tres países de América Latina (Uruguay, Argentina y Chile). Entre sus hallazgos las autoras sostienen que las cooperativas de cuidados concilian distintas necesidades de un amplio sector de la población (niñez, adultos y adultas mayores, grupos de atención dirigida por temas de salud), a la vez que busca ofrecer mejores condiciones laborales a las mujeres que comúnmente realizan estas labores en un marco donde prima la informalidad. Estas formas asociativas sin embargo presentan grandes obstáculos para sostenerse en el tiempo y convertirse en una opción relevante en términos de empleabilidad. Los aportes de las autoras invitan además a reflexionar acerca de la diversidad que asumen estas prácticas cooperativas en cada país más allá de la cercanía territorial.
La empleabilidad de las mujeres en organizaciones cooperativas está presente en el Capítulo 5 de España “Presumir sin sufrir. Mujeres que emprenden juntas para que otro éxito sea posible” por Alicia Rius Buitrago, Rocío Nogales Muriel, Ana Lorenzo Vila y Sandra Salsón Martín. En este capítulo las autoras se proponen analizar los proyectos “Juntas emprendemos” y la “Escuela de Emprendedoras Juana Millán” cuyos objetivos se centran en brindar espacios de capacitación, formación y empoderamiento de mujeres emprendoras cooperativistas desde la Economía Social. En estos procesos de articulación educativa, las integrantes de las cooperativas generaron vínculos con profesionales y colegas universitarios, nutriendo una extensa red de colaboración institucional que promovió la vinculación con mujeres referentes de la Economía Social y Solidaria en pos de un interés común estratégico. A la vista de las autoras, las experiencias de formación permitieron resignificar la noción de emprendimiento desde una perspectiva distinta al éxito individual por una perspectiva colectiva y comunitaria que promueva la transformación de dinámicas económicas imperantes a través de redes de apoyo mutuo y colaboración.
La argentina Soledad Cutuli escribe el Capítulo 6 “Cooperativas e inclusión social para mujeres trans en Argentina" en el que analiza la primera experiencia cooperativa de trabajo trans en el mundo con lugar en Buenos Aires. Desde un abordaje etnográfico se propone analizar la organización política de las mujeres trans, sus prácticas, demandas, reivindicaciones, así como el respaldo del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) y el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social (MTESS) para establecer una cooperativa textil en el sur del área metropolitana de Buenos Aires. En el desarrollo del capítulo se observa que los discursos gubernamentales sostenidos sobre una construcción moral y digna del trabajo pusieron el foco en la cooperativa como una alternativa laboral a la oferta de sexo, sin por ello dejar de visibilizar las tensiones de esta población en su vida cotidiana permeadas por sus prácticas “de la calle” como estrategia histórica de supervivencia. La autora enfatiza los discursos oficiales sobre una idea de “dignidad” del trabajo, a la vez que resalta la importancia de la presencia estatal para materializar este proyecto de inclusión laboral como ha sido la primera cooperativa textil de trabajo para mujeres trans. La inserción laboral es retomada por las autoras Carolina Verónica Verzosi Vargas y Paulina Iralda Verzosi Vargas quienes escriben el Capítulo 12 “Progreso de la inserción femenina. La experiencia desde la economía popular y solidaria en el Ecuador” cuyo capítulo inicia con tres preguntas: ¿cuáles son los avances que tiene Ecuador en materia de inserción femenina en el sector popular y solidario?, ¿cómo el CEO femenino de la economía popular y solidaria puede formar liderazgos transformadores y un legado a las nuevas generaciones?, ¿cómo la economía popular y solidaria se construye sobre la base de equidad de género? A lo largo del texto, las autoras analizan las desigualdades de género presentes en el país en relación con la inserción laboral entre hombres y mujeres, y el desafío que promueve la ley Economía Violeta hacia los nuevos gobiernos, en torno a la implementación y desarrollo de políticas públicas de empleo dispuestos a integrar la fuerza de trabajo femenina bajo condiciones laborales de vida digna.
Los liderazgos de las mujeres, sus participaciones y empoderamientos en la Economía Social y Solidaria son abordados en el Capítulo 7 con el título “Visión y visibilidad del liderazgo femenino en el sector cooperativo paraguayo”. Las autoras Zulema Nacimiento Coronel y Ana Leticia Carosini Ruiz-Díaz se proponen abordar la participación histórica de las mujeres en las entidades de la Economía Social y la actual visibilidad en las instancias de decisión de las organizaciones cooperativas de Paraguay. Señalan que el cooperativismo en el país ha tenido un gran auge con el retorno de la vida democrática, en 1989, luego de 34 años de dictadura militar. A su vez, resaltan que en estas dinámicas organizativas también fueron asumiendo relevancia los espacios de géneros incentivados por la creación en 1994 del Comité Nacional de Mujeres cooperativistas además de los Comités de Género de las propias cooperativas. En sus aportes las autoras afirman que existen diferencias en torno a la participación de las mujeres en los órganos de dirección según se trate de cooperativas de Ahorro y Crédito y de Producción. Asimismo, aunque se observa un proceso inicial de participación femenina con capacidad de gestión incentivada por una mayor preparación académica, existe poca visibilidad sobre las tareas y aportes que las mujeres desempeñan en la vida institucional de las cooperativas. Nacimiento Coronel y Carosini Ruiz-Díaz enfatizan la relevancia de construir espacios de diálogo y de apoyo mutuo entre las propias mujeres cooperativistas de Paraguay en pos de promover el desarrollo de liderazgos femeninos en los ámbitos cooperativos.
Con abordaje en Perú, Zoraima Julieta Laura Castillo desarrolla el Capítulo 9 titulado “Liderazgo trascendental: su aplicación por mujeres artesanas emprendedoras del sur del Perú” en donde analiza las características del liderazgo ancestral ejercido por las artesanas textiles en el departamento de Puno. La autora trabaja acerca de la importancia que asume el tejido como artesanía y práctica ancestral, identitaria, cultural, de transmisión generacional, que representa una cosmovisión y filosofía de la vida comunitaria, en un “hacer con otras”. A través de un abordaje cuantitativo que implicó la aplicación de un cuestionario a 110 mujeres líderes artesanas, se evidencia que el liderazgo trascendental es propio del ejercicio que llevan a cabo las mujeres líderes de los emprendimientos en el sector textil de artesanía. En esta dirección trabaja también el Capítulo 11, con el título “Trajetória das mulheres na economía social e solidária em Santa Catarina, Brasil: testemunhos de empoderamiento”-. Las autoras Vanêssa Simon, Maurício Serva y Carolina Andion analizan la historia de vida de cuatro mujeres que integran organizaciones de la Economía Social Solidaria en Santa Catarina, a los fines de comprender sus trayectorias, las actividades que desarrollan, los procesos de empoderamiento a lo largo del tiempo, y las transformaciones en las propias comunidades donde viven. Las autoras manifiestan que la economía social y solidaria favorece el proceso de empoderamiento femenino desde una perspectiva tanto social como política. Y aunque el empoderamiento es considerado una construcción propia también se resalta que es en el colectivo que se pueden materializar los logros y consolidar esos empoderamientos, a través de dinámicas de “poder con otros” en el marco de estrategias colectivas y de acciones cooperativas.
El libro permite conocer distintas experiencias y bucear por las diversas realidades presentes en las regiones de Latinoamérica y España en un doble registro; por un lado, en torno a las singularidades y particularidades culturales, locales, geográficas y sociales de las prácticas y experiencias cooperativas, sin perder de vista por otro lado, los aspectos estructurales generales sobre un mismo eje de problematización: la articulación necesaria e inminente de una economía social-solidaria- de género que ponga la vida en el centro.
Bibliografía
Bouchard, Marie; Marcuello Servós, Carmen y Álvarez Rodríguez, Juan Fernando (coords.) (2024) Economía Social y Solidaria y Género. Una mirada desde Iberoamérica. Editorial CIRIEC, España, Centro Internacional de Investigación e Información sobre la Economía Pública, Social y Cooperativa.
Mutuberría Lazarini, Valeria (2022). Economía Social y Géneros: Apuntes para el debate urgente desde la experiencia argentina. En Mujeres, Cooperativismo y Economía Social y Solidaria en Iberoamérica. CIRIEC. España, Centro Internacional de Investigación e Información sobre la Economía Pública, Social y Cooperativa.
[1] Socióloga, docente e investigadora. Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini. Correo electrónico: mafloro@gmail.com